Es demasiado fácil vivir sintiéndonos culpables como mamás y papás. La sociedad y nuestras propias expectativas nos imponen estándares tan altos que, a menudo, sentimos que nunca estamos a la altura. Esta culpa puede ser abrumadora, llevándonos a cuestionar cada decisión y acción que tomamos en la crianza de nuestros hijos. Nos preguntamos constantemente si estamos haciendo lo suficiente, si estamos tomando las decisiones correctas, y si nuestros hijos serán felices y exitosos gracias a nuestros esfuerzos 🫠.

Muchas veces esa culpa nos consume y afecta la manera en la que nos relacionamos con nuestros hijos y nuestro estado de ánimo de muchas maneras 😢. La culpa puede manifestarse como irritabilidad, ansiedad, o incluso depresión, lo que a su vez impacta negativamente en la dinámica familiar. Es importante reconocer estos sentimientos y entender que son una parte normal de la crianza, pero también es crucial no dejar que nos definan. Nuestros hijos necesitan padres presentes y emocionalmente disponibles, no padres perfectos.

Ayuda muchísimo validar el trabajo que hacemos en la crianza y cómo cada día buscamos hacer las cosas de maneras más sanas para nuestros hijos 🙋🏻‍♀️. Reconocer nuestros esfuerzos y logros, por pequeños que sean, puede ser un gran alivio. Celebrar las pequeñas victorias diarias, como un momento de conexión genuina con nuestros hijos o una situación manejada con paciencia, nos recuerda que estamos haciendo un buen trabajo. La crianza es un viaje lleno de desafíos, pero también de innumerables momentos de alegría y satisfacción 🌟.

Lo que les das a tus hijos no es perfecto, no es sin fallos, no es sin heridas y frustraciones, pero es tuyo y vale mucho la pena que les entreguemos ese pedazo de nosotros lleno de amor incondicional que queremos que lleven en su mente toda la vida 🙌🏼. Este amor imperfecto es lo que realmente importa y lo que nuestros hijos recordarán. Al final del día, lo que más valoran es saber que son amados y aceptados tal como son. Así que, aunque la culpa pueda ser una compañera constante, es esencial recordar que estamos haciendo lo mejor que podemos, y eso es más que suficiente 💖.

Si estás buscando apoyo o simplemente deseas mejorar tus habilidades como padre o madre, te invito a agendar una cita conmigo. Juntos podemos explorar tus preocupaciones y desarrollar un plan que te ayude a criar hijos felices y saludables. No dudes en contactarme para más información y para programar una sesión. ¡Estoy aquí para ayudarte en cada paso del camino!